La revolución del crédito hipotecario
07/08/2017Vuelve el "comprador con crédito" al mercado.
Compartir
Un nuevo actor brilla en el mercado porque está cumpliendo con las expectativas que despertaron sus promocionados lanzamientos, durante el primer semestre de 2016.
Después de más de una década en la que los préstamos hipotecarios solo existían para quienes no los necesitaban, hoy aparecen como una solución real para que los inquilinos puedan convertirse en propietarios.
El Colegio de Escribanos de la Ciudad de Buenos Aires nos informa que en mayo se escrituraron 5.145 propiedades (crecimiento del 41,1% interanual) de las cuales un 19,4% fueron con hipoteca: un descomunal aumento del 166% comparado con el mismo mes de 2016, y un 40% más que en abril de 2017.
Si anualizamos los datos en los primeros 6 meses de este año se escrituraron un 43,4% más de propiedades que durante el mismo semestre de 2016 y el monto promedio de las transacciones se elevó un impactante 118%, hasta un valor de U$S 143.675.
Por supuesto, esto recién comienza, y el volumen prestado representa hasta el momento solo el 1,2% del PBI, mientras en Chile llega al 17%.
El tomador del crédito aparece como un nuevo perfil de comprador, bien definido, con características que tanto la inmobiliaria como el propietario tienen que contemplar para evitar sorpresas, ya que opera en el mercado bajo ciertas circunstancias y limitaciones que es importante conocer, o recordar:
1. Debe elegir el banco (Nación, Ciudad, Provincia, algo más burocráticos y exigentes, o alguno privado) en el que presentará su solicitud, y llevar acreditación de ingresos en blanco para obtener una pre-calificación crediticia que definirá el monto que la institución podrá prestarle, por lo general en muy pocos días.
2. A partir de ése momento tendrá alrededor de 45/60 días para encontrar la propiedad que le interesa que deberá concluir con una oferta de compra (reserva) que deberá presentar al banco.
3. El banco enviará un tasador al inmueble elegido para que determine su valor: esta etapa pueden consumir entre 15 y 30 días.
4. Finalmente transcurrirán entre 30 y 60 días más hasta que el banco otorgue el crédito.
Estos tiempos pueden poner los pelos de punta de algunos vendedores, acostumbrados por años a operaciones en efectivo y en las que las demoras habituales no pasaban de los 30 días. Con una reserva condicionada al otorgamiento del crédito los días pueden pasar más lentamente para todos los involucrados.
Si no hay contratiempos el banco se comunicará con el solicitante informando el nombre del escribano designado para la operación (o para que elija uno de entre los disponibles) y la operación entrará en la fase final: escritura.
Compartir